De acuerdo con medios españoles, una de las causas que provocó la salida de
Josep Guardiola del timón FC Barcelona fue que el presidente del equipo, Sandro
Rosell, rechazó una de las condiciones que había puesto Pep para seguir: la
venta de cuatro jugadores de gran peso.
La 'lista negra' de Guardiola la
conformaban Daniel Alves, Gerard Piqué, David Villa y Cesc Fábregas, de acuerdo
con François Gallardo, agente de jugadores, en entrevista para el programa Punto
Pelota de la televisión española.
"Guardiola puso unas condiciones a
Rosell para renovar. Entre ellas estaba vender a cuatro jugadores: Alves, Piqué,
Cesc y Villa", dijo el agente; "Pep no los veía comprometidos, mientras que las
razones para que se marchara Villa eran deportivas".
En la entrevista el
agente explica que Guardiola consideraba que Alves no estaba para seguir en el
club, Piqué cada vez mostraba un nivel más bajo, mientras que "se sintió
especialmente defraudado con Cesc como persona, porque él pidió su fichaje y
luego le tendió la mano, Fábregas le falló".
Además, explica que el
presidente culé, al ver los nombres de la lista, prefirió prescindir del
estratega, pues los cuatro jugadores eran parte importante del equipo y temía
que la afición le recriminara si los dejaba ir.
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